Contouring, baking, strobing... hasta ahora las tendencias de maquillaje se centraban en corregir y destacar la forma de nuestro rostro. Ya sabes cómo resaltar tus pómulos y estrechar la nariz, pero reconócelo, es un poco aburrido (por no hablar de tedioso) y a ti lo que te gusta es jugar con los colores. ¿Lista para el siguiente nivel? Pues prepara tus barras de labios favoritas porque lo que se lleva ahora es el ombré o degradado.
Este efecto consiste en utilizar varias tonalidades de labiales y aplicarlas en diferentes partes de los labios para un resultado multidimensional. En cuanto los colores, escogeremos dos o tres dentro de la misma gama cromática y acabado (mate/brillo). Además, igual que para las sombras de ojos, es importante difuminar bien los tonos para que nos se vean cortes en un tono y otro, de momento no buscamos volver a los contrastes de los 90.
